lunes, 1 de agosto de 2011

Cuarentaiseisavo Capítulo.

Nos quedaban cinco o diez minutos de trayezto en el tren. Cuando llegamos cogimos las cosas y nos dirigimos al pueblo el cual estaba al lado de la playa. 
Fuimos paseando hasta llegar allí. 
El pueblo era pequeño, lleno de casitas blancas, árboles, prados verdes, algunos comercios. La verdad no parecia que estuvieramos en New York. 
Decidimos ir andando, para no gastar el dinero en un taxi. 
Cuando llegamos a la playa. No era precisamente como me lo habia esperado, El agua estaba cristalina, apenas habían algunas olas. La arena era blanca. Había algunas Palmeras a los alerededores, y una especie de restaurante al final de ella.  Y aparte de eso había bastante gente.
Lo que más me llamo la atención, fue una especie de catarata que había al final.
-Oye Bleik, Yo no sabía que aquí las playas fueran así, esto no parece New York.
-Lo se. Es una Playa artificial, ¿mola verdad? El agua viene de un gran lago el cual hay más ariba de las montañas. 
Me dijo Bleik.
-Ammh. Bueno de todos modos lo pasaremos bien.
-De eso estoy seguro. 
Nos sonreímos. 
-Ehh Parejita! Cuando querais os venis eehh!
Nos gritaba Matt aguitando el brazo desde la otra punta de la playa, había conseguido encontrar sitio. 
-Yaa vamos!!
Le dijo Bleik, agarrandome de la mano y corriendo hacía ellos. 
Cuando pusimos todas las toallas, las sombrillas las sillas y todo en orden. Me quite el pantalon y la camiseta. Deje las gafas encima de la toalla. 
La verdad comparada con claudia yo tengo algo de complejo, pero no me importa. 
Las dos fuimos corriendo hacia el agua agarradas de la mano. 
Matt y Bleik fueron corriendo detrás de nosotras. Nos cogieron de la cintura y nos llevaron a dentro del agua, y ahí empezaron a dar vueltas, y caímos al agua. 
Estuvimos los cuatro jugando durante horas chapoteando en el agua. 
Bleik me subio en sus hombros, y Matt le hizo lo mismo a Claudia. 
Estubimos un haciendo el idiota en el agua. 
Después de mucho, al final empezarón a ruguirnos las tripas, y salimos a comer algo. Nos secamos con las toallas y nos fuimos al restaurante a comer algo. 
Mientras comiamos empezamos a hablar, reir.. como de constumbre la liamos en el restaurante. Por que Matt y Bleik empezaron a tirarnos comida. Y bueno nosotras no nos ivamos a quedar calladas . ¿No? 
Después de comer.. Nos fuimos un otra vez a la playa. Al lugar en donde estaban las cosas. 
-Oye, Yo voy a tomar el sol un rato.
Dijo Claudia, poniendose las gafas de sol, y tumbandose en la toalla. 
-Pues yo me quedo con tigo. 
Le dijo Matt con una gran sonrisa. 
-Bueno.. pues yo quiero ir a aquel luga. 
Dije señalando aquel acantilado, el cual estaba aquella gran catarata. 
-Mel.. allí no va nadie, es peligroso. 
Me dijo Bleik.
-Mel, Bleik tiene razón aquello es peligroso.
Me volvió a repetir Claudia.
-Ami me da igual, yo quiero ir a ver las vistas desde allá. 
Dije ansiosa.
 -Bueno.. pues ire con tigo para que no corras peligro.
Me dijo Bleik sacando una de sus mejore sonrisas. 
Mientras nos dirigiamos hacia allí. 
-Tened Cuidado!
Nos dijero Matt y Claudia desde la toalla. 


Fuimos corriendo por la arena hacía aquellas grandes rocas. 
Cuando llegamos. 
-Ofu! Parecia más pequeña desde lejos.
Dije.
-Bueno si tienes miedo podemos darnos la vuelta.
Dijo Bleik en tono burlon. 
-Ni lo sueñes.! 
Dije yo mientras empezé a subir las rocas.
-Eh! Esperame!
Me decia Bleik desde abajo.
Después de unos 10 minutos de escalar ese acantilado, 
por fín llegamos a ariba del todo.
-Woow.. Increíble. 
Dije asombrada.
-¿El que? 
Bleik todavía subía por las rocas, cuando llego casi a arriba le ayude a subir. 
-Increíble. 
Dijo mirando el horizonte.
Nos miramos y nos cogimos de las manos. 
-Es increíble. 
Repetimos los dos una  y otra vez.
Era precioso, una cascada, la cual dejaba un arcoiris en medio, el mar iluminado por el sol, liso sin ninguna ola, brillando, el horizonte. El cielo azul sin nubes... Es Precioso.
Bleik y yo estabamos agarrados. Estavamos apunto de besarnos, cuando alguien inoportuno apareció intentando escalar.
-Hey! Ayuda!
Fuimos a mirar, y Bleik la ayudó a subir.
-¿Wendy?¿Que haces aquí?
Dijimos los dos a la vez.
-¿Y que haceis vosotros?
Preguntó ella.
-Pues nada.. tampoco te importa.
Dije cruzando los brazos.
-Pues entonces a ti no te importa lo que yo haga aquí ¿No?
Dijo ella con tono de burla.
-Wendy. ¿Te vas?
-Bleik, no me heches! eh! 
-Es que estabamos nosotros y bueno has venido a incordiar.
-Yo no he venido a hacer nada, cariño, simplemente he venido con unos amigos. Y os he encontrado de casualidad.
-¿Amigos que amigos? ¿Tu no eras nueva aquí y no concias a nadie aparte de a Bleik?
Dije yo.
-Si bueno, es que según ellos. También son vuestro amigo.
-¿Eh?
Preguntamos los dos a la vez.
-Venid y os lo enseño.
Dijo guiñandonos un ojo.
Bajamos por el acantilado, y fuimos ha donde se encontraban su amigo. 
Cuando llegamos hacia donde estaban ellos, nos llevamos una ingrata sorpresa.
Eran Jaime y Lusi!!

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